Mi Manifiesto
Diseñé Zcapitta como diseñé mi vida: con capas, con rupturas, con pasión, con intención. Para mujeres como yo —como nosotras— que entendemos que el estilo no es vanidad: es lenguaje, es voz, es presencia. He aprendido que mi cuerpo no necesita ser aprobado, solo habitado. Que mi sensualidad es mía, que mi dolor también puede ser belleza. Que vestirme no es cubrirme: es contarme. Zcapitta no es una marca. Es un acto de libertad. Una declaración de poder emocional. Una piel nueva, diseñada para renacer.